LLegamos a lugares imaginados y mágicos para dejar de ser nosotros... y ser nosotros. A la sombra de nuestros propios días y nuestra existencia, sesteamos con la conciencia despierta y los sentidos dejándose ir en savia vital. Tomamos conciencia de cual frágiles somos y de la gigantesca medida de nuestros actos. Crecemos, echamos raíces nuevas que hacen estremecerse al universo... y somos felices en nuestra soledad sabia y bondadosa para con nosotros mismos. Y abrazamos a la vida como quien abraza a un amigo. Escucho mis latidos, uno tras otro...y sonrío. |
2 comentarios:
llegamos
y nuestras sombras conversan
(coquetas)
mientras nosotros nos miramos crecer...
pd:[tus palabras, Tierra, latidos ...]
Yo también los oigo
los siento
te espero
aquí en la sombra
para seguir haciendo
versos de luz...
Un abrazo =)
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